
En el triceps de su brazo derecho lleva una tatuaje que
dice: "Cos I'm Free" (porque soy libre).
Cathy Freeman es la mejor atleta de la historia de
Australia y un icono del pueblo aborígen australiano,
siempre tan maltratado por la cultura anglosajona dominante en aquel país.

Catherine Astrid Salome Freeman nació el 16 de febrero de 1973 en Mackay,
Queensland, y comenzo a practicar atletismo cuando tenía
11 años en el club Slade Point Amateur Athletics. Con
solamente 16 años integró el equipo australiano de
relevos de 4x100 metros que ganó el oro en los Juegos de
la Commonwealth en Auckland (Nueva Zelanda) en 1990.
Dos años después
participó en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992,
siendo la primera atleta aborigen en participar en unos
Juegos. Fue eliminada en los cuartos de final de los 400
metros con un tiempo discreto de 51.52, aunque disputó
la final de relevos 4x400 metros, en la que las
australianas acabaron séptimas. Poco después de los
Juegos, fue segunda en los 200 metros de los Campeonatos
del Mundo Junior disputados en Seúl (Corea del Sur).
En 1993 participó en los
Mundiales de Stuttgart en la prueba de 200 metros,
llegando hasta las semifinales y quedándose muy cerca de
la final (fue 5ª en su prueba con 22.58 y se
clasificaban las 4 primeras). Su primer gran éxito, que
le dio a conocer entre el gran público, fue su doble
triunfo en 200 y 400 metros en los Juegos de la
Commonwealth de 1994, celebrados en la ciudad canadiense
de Victoria. Durante la celebración de sus triunfos
tomó una bandera aborígen que envolvió sobre sus
hombros. Fue una contundente declaración política que
generó gran controversia en su país, aunque la mayoría
de la gente la apoyó, simpatizando con su causa y la del
pueblo aborígen.
Cathy le dijo a un reportero del New York Times: "Llegará el tiempo en
el que jugaré un papel más decisivo en la política y
los asuntos aborígenes. Pero por ahora, pienso que estoy
hacienlo bien lo que estoy haciendo".
    
Juegos de la Commonwealth de Victoria 1994 - Cathy Freeman
A la derecha con la bandera aborígen
Juegos de la Commonwealth deVictoria 1994 - Podium de los 200 metros
(I-D) Melinda Gainsford-Taylor, Cathy Freeman y Mary Onyali
Acabó el año 1994 como segunda del ranking mundial con 50.04, marca conseguida
en París y que solo fue superada por la francesa Marie-José Perec (49.77). Al año siguiente, en los Campeonatos Mundiales de Gotteborg 1995 se quedó a las puertas del
podio, acabando cuarta clasificada aunque lejos de la
ganadora, que de nuevo fue Perec. Sin embargo en esos
campeonatos Cathy consiguió, con el equipo australiano
de relevos 4x400 metros, una inesperada medalla de
bronce, solo por detrás de Estados Unidos y Rusia. El
cuarteto lo integraban por este orden Lee Naylor, Renee
Poetschka, Melinda Gainsford-Taylor y la propia Cathy Freeman.

La campeona olímpica y
mundial Marie-José Perec se interpondría en su camino
hacia el título olímpico de los 400 metros en los
Juegos de Atlanta 1996. En una final olímpica
inolvidable, disputada el 29 de julio, Cathy Freeman
realizó la carrera más rápida de su vida con 48.63, un
extraordinario registro que sin embargo solo le sirvió
para ganar la medalla de plata, ya que la francesa Perec
sorprendió a todos haciendo 48.25 y revalidando así su
título olímpico de cuatro años antes en Barcelona.
Pese a su segundo puesto, casi nadie dudaba ya de que
Cathy Freeman estaba en camino de convertirse en la mejor
cuatrocentista del mundo, cosa que demostraría muy pronto...


Atlanta 1996 - Cathy Freeman


Atlanta 1996 - Podium de los 400 metros
(I-D) Falilat Ogunkoya, Marie-José Perec y Cathy Freeman

En los Campeonatos del
Mundo de 1997 celebrados en Atenas, Cathy Freeman ganó
la medalla de oro con una marca de 49.77, solo 2
centésimas por delante de la jamaicana Sandie Richards
(plata con 49.79), mientras que tercera fue la
estadounidense Jearl Miles-Clark (49.90) Para demostrar
que las criticas no le habían afectado, Cathy repitió
en Atenas la celebración que realizó en 1994 con la
bandera aborígen. Además del título mundial acabó
liderando el ranking mundial de la temporada con una
marca de 49.39 conseguida en Oslo (Noruega).
Dos años después
revalidó su título mundial en los Campeonatos del Mundo
de Sevilla 1999, venciendo con 49.67 por delante de la
alemana Anja Rücker (49.74) y de la jamaicana Lorraine Graham (49.92).


Sevilla 1999 - Cathy Freeman, campeona del
mundo por segunda vez

A pesar de su talento y del prestigio internacional que le ha dado al deporte
australiano, Cathy Freeman ha sido objeto de controversia
en su país, un país que desde los años 50 con Marjorie Jackson y Betty Cuthbert no había podido presumir de una
atleta de tanta categoría. Algunas personas desaprueban
la ostentación que hacía de su orgullo cultural, y
piensan que debería mantenerlo oculto. Incluso su
eleccion para encender la llama olímpica en Sydney 2000
generó algunos comentarios desfavorables en la prensa,
aunque ciertamente minoritarios.
Precisamente el acontecimiento más importante de su carrera iban a ser
los Juegos Olímpicos de Sydney 2000, celebrados en su
propio país. En la ceremonia inagural de los Juegos ella
fue la elegida como última portadora de la antorcha y la
encargada de encender el pebetero del estadio, en una
imagen que dio la vuelta al mundo.



Cathy Freeman en la ceremonia inagural de Sydney 2000
La expectación generada
en Australia practicamente la obligaba a ganar la medalla
de oro olímpica, lo cual le sometió a una presión
dificil de aguantar durante varios meses. Todo lo que no
fuese ganar el oro sería considerado un fracaso y una
gran decepción. Sin embargo logró sobreponerse a todo y
no defraudó las expectativas, imponiéndose en la final
disputada en 25 de septiembre con una gran marca de
49.11, la mejor del mundo ese año, y con casi medio
segundo de ventaja sobre la jamaicana Lorraine Graham
(49.58), mientras que el bronce se lo llevaba de forma
sorpresiva la británica Katherine Merry (49.72).

Sydney 2000 - Cathy Freeman

Sydney 2000 - Cathy Freeman


Sydney 2000 - Cathy Freeman, campeona olímpica

Sydney 2000 - Medallistas en los 400 metros
(I-D) Katherine Merry, Cathy Freeman y Lorraine Graham
Convertida en una heroína nacional, a partir de los Juegos tuvo que hacer frente a
multitud de compromisos sociales, ya que todo el mundo
quería hacerse una foto con la nueva estrella olímpica
australiana. Practicamente su carrera atletica se acabó
ahí. Anunció que se tomaría el año 2001 sabático,
para regresar después. Sin embargo luego tuvo que hacer
frente a un serio contratiempo familiar, la enfermedad de
su esposo Sandy Bodecker, un directivo de Nike con quien
se había casado en 1999. Cathy retrasó su regreso a las
pistas para acompañar a su marido, quien se sometió a
un tratamiento contra el cáncer en Estados Unidos.
Su regreso finalmente se
produjo en el verano de 2002 en los Juegos de la
Commonwealth de Manchester (Inglaterra), aunque solo como
integrante del cuarteto australiano de relevos 4x400
metros, que ganó la medalla de oro. Luego participó en
varias competiciones en su país, aunque con resultados
discretos. Lo mejor que logró en la vuelta al óvalo fue
51.66, un tiempo que no le permitía competir a nivel mundial.
Su primera y única carrera de nivel internacional sobre 400 metros después
de los Juegos de Sydney fue en el Grand Prix IAAF en
Eugene (EEUU), el 24 de mayo de 2003, donde Cathy Freeman
consiguió apenas un quinto lugar con una pobre marca de 51.80
Dos meses después, el 16 de julio de 2003, anunció su retirada definitiva de las
pistas: "He perdido el hambre, la exigencia y el
impulso. Nunca volveré a sentir esa satisfacción. Tengo
que ser realista. Es tiempo de que acepte que ya no puedo
ser la mejor atleta".
Cathy Freeman fue una gran atleta y una gran defensora del pueblo y la cultura
aborigen, y también un ejemplo de como la habilidad
natural y la voluntad personal pueden sobreponerse a cualquier prejuicio.